Silencio
...Y el viento calló, tan de pronto, que apenas, el instante en el que dejó de silbar, medir se pudiera, como el presente, tan fugaz, que es dudoso si deja de ser aun primero que sea. Y hubo un súbito silencio advenedizo, que pareció más largo, más hondo, más sereno, como el sol es más claro y radiante después de un día nublado, después de una noche oscura.
...Y silencio en el rancho, y en el arroyo, silencio, y silencio en el monte, y en el orco molle solitario, silencio, dondequiera, en todas partes, silencio había… Todo se estaba como más solo y más quieto. Aun el tiempo mismo, en la imperturbable quietud serena de las cosas, haberse detenido parecía.
En la blanca noche fría, sólo el silencio se oía.